Marineros por un día: navegación, descubrimiento y primeras veces a bordo del Galaxie

El pasado 7 de abril, el Mediterráneo brilló con luz propia. En el marco de las Jornadas de Impacto Social y Ambiental impulsadas por Marina Ibiza, un grupo de jóvenes vivió su primer acercamiento al mundo de la vela a bordo del Galaxie, un barco único por su innovación tecnológica y su respeto por el entorno.

Más que una simple salida al mar, la jornada fue una experiencia educativa, emocionante y transformadora. Acompañados por el equipo de Love the Mediterranean y por el capitán del Galaxie, los jóvenes se convirtieron en marineros por un día, descubriendo los secretos de la navegación y el cuidado del mar desde dentro.

El Galaxie: un barco que marca la diferencia

Antes de zarpar, el grupo conoció el Galaxie por dentro: un velero impulsado por energía eléctrica, diseñado para minimizar su huella en el medio marino. Aprendieron cómo funciona su sistema de propulsión silencioso, cómo se gestiona la energía a bordo y por qué es importante avanzar hacia formas de navegación más sostenibles. Este primer contacto con la innovación despertó preguntas, interés y admiración.

Descubriendo el arte de la maniobra

Durante la travesía, los jóvenes observaron y participaron en maniobras básicas, entendiendo cómo se coordinan los movimientos en cubierta y cómo cada acción influye en el rumbo del barco. Fue una forma directa y lúdica de descubrir el trabajo en equipo que requiere la vida a bordo.

La lógica del viento

En pleno mar, sintieron el viento en la cara y escucharon cómo las velas captan la energía del viento para mover el barco, sin necesidad de motores. Aprendieron por qué la orientación, la fuerza del viento y la posición de las velas son clave en la navegación a vela. Fue un acercamiento vivencial a esa antigua danza entre naturaleza y técnica que caracteriza al mundo de la vela.

Tomando el timón

Uno de los momentos más especiales fue poder probar el timón, guiados por el capitán. Descubrieron cómo responde el barco a cada pequeño giro y qué significa llevar el rumbo, aunque sea por un instante. Para muchos, fue su primera vez sintiendo esa mezcla de responsabilidad, concentración y emoción al estar al mando.

Un baño para cerrar el día

El mar estaba tranquilo y el sol acompañaba, así que, después de la navegación, la jornada terminó con un baño en aguas cristalinas. Risas, juegos y saltos al mar cerraron un día inolvidable, donde la educación marina se vivió desde la alegría, el descubrimiento y el respeto.

Gracias a Marina Ibiza, impulsora de esta iniciativa, y a todas las personas que lo hicieron posible. Y, por supuesto, gracias al equipo del Galaxie por acercar el mundo de la vela y la innovación sostenible a nuevos ojos, nuevas manos y nuevas generaciones.